Durante la Semana Santa nos fuimos a comer el tradicional Cocido Maragato a Santiagomillas. Con esto de las prácticas casi no he tenido tiempo para nada y tenía ganas de contar cómo es este singular plato estrella de la gastronomía maragata.
Primero diré que fuimos a Casa Luciano, que es al que siempre vamos porque Marta y Oscar son expertos en esto de gastronomía leonesa y yo me fío plenamente de ellos. Estábamos Fran, Mónica, otra Mónica, Yoli, Marta, Oscar, Álvaro (gordito), Mª Jesús y la que escribe (y hace la foto).
El sitio es precioso y tiene un jadín muy bonito para el verano, aunque aún no hacía tiempo para estar en él, como se puede ver en la foto el viento soplaba de lo lindo.
La historia de este cocido está llena de especulaciones, entre ellas la de mi hermano que siempre nos cuenta el mismo "rollo", que los romanos comían el cocido maragato antes de ir a la batalla y por si las moscas se comían antes la carne por si tenían que salir corriendo a luchar, por lo menos comer lo contundente que les diese energía.
La verdad, la historia así contada suena hasta "romántica" pero yo he estado investigando y me quedo mejor con esta versión: "hay quien dice que lo pusieron de moda los arrieros que habían de comer en tránsito en olla de barro, aunque parece más que nada fórmula lógica de comida labriega hecha en campo de faena, si se iniciara por lo sopa, vaciando el calor de la olla, se llegaría a las carnes totalmente frías".
El Cocido Maragato se come al revés que el resto de cocidos de España, primero las siete carnes: lacón, patas y oreja de cerdo, cecina, cordero, cabra, tocino y chorizo, añadiéndose además el "relleno" (hecho de pan, huevo, ajo y perejil).
Después los garbanzos con repollo, en este caso los típicos de León "pico pardal", de una calidad excepcional reconocida como de los mejores en España cuyas principales características son: hollejo suave y que no pela, ternura y cremosidad y un sabor exquisito.
Para los que no sean de León les cuento que el nombre viene porque su forma se parece al pico de los pardales, que es como se llama en esta zona los gorriones. Tengo que decir que para mí es lo más delicioso del cocido.
Y por último la sopa con fideos, exquisita.
De postre... natillas con bizcochos hummmmmmm
Por supuesto para digerir todo esto no podía faltar un bueno licor de hierbas.
Degustar un Cocido Maragato es una experiencia gastronómica que yo recomiendo a todo el mundo. Así que ánimo y acercaros a La Maragatería y a Astorga, su capital, una comarca con mucha historia y mucho que disfrutar en León.
Kissy kissy de vuestra Peggy Piquito de Pardal